Las cinco principales ciberamenazas para 2018 y cómo combatirlas
En 2018, la seguridad informática ya no será un lujo, sino una necesidad ¿Cuáles serán los delitos que intentarán expandirse por nuestras redes durante el próximo año? ¿A qué hay que atender para no caer en la trampa de los criminales y cómo protegernos de su accionar?
No pensamos lo complejo que es el suministro eléctrico, hasta que nos quedamos sin electricidad. No recordamos lo vital que es el agua, hasta que abrimos la canilla y no sale ni una gota. Algo similar, pero mucho más peligroso y extendido, ocurre con la seguridad informática. Mientras todo funcione bien, no lo notaremos. Pero un día, podemos levantarnos y no contar con nuestros datos, con nuestra información más esencial y privada.
Hoy, en todos los aspectos de nuestra vida están involucradas las computadoras. Necesitamos de la computación para gestionar el día a día, el trabajo en las empresas, recibir atención hospitalaria, movilidad, tener servicios esenciales de agua, luz, señalización, seguridad o comunicación. Todo. Entonces, cuando se ataca un sistema informático, los daños pueden ser enormes.
El mundo está en riesgo todos los días frente a los avanzados hackers
El año que se va deja varios casos que serán emblemáticos en la historia del cibercrimen: WannaCry, NotPetya y BadRabbit fueron solo los más conocidos de una gran serie de ataques que debieron afrontar las empresas en el mundo.
A principios de 2017, varios analistas de mercado predecían daños del orden de los 5 mil millones de dólares por ataques de malware, que resultaron demasiado optimistas: basta como ejemplo los 250 millones de dólares de daños directos sufridos por Maërsk, que seguirán creciendo cuando se agreguen las demandas de las empresas damnificadas por la parálisis que afectó a la compañía naviera (incluidos exportadores argentinos).
¿Qué pasará en 2018? Los pronósticos indican que los ataques se van a intensificar y diversificar. No sólo el sistema de una compañía podrá verse afectado, sino que se tomarán también como blanco a infraestructuras críticas, teléfonos celulares y dispositivos conectados a la red (Internet de las Cosas).
¿Por qué? Porque la interconectividad es cada vez mayor, porque aún quedan muchas vulnerabilidades en los sistemas, porque se trata de una actividad maliciosa muy rentable, escalable y difícil de perseguir y castigar por los estados. Y porque se producen de manera transnacional con actores de diferentes partes del mundo (un hacker fabrica un virus en Rusia, que compra un argentino, cuyas víctimas están en Europa y Estados Unidos, por ejemplo).
Asimismo, las penas para este tipo de delitos – si es que llegan – son llamativamente bajas.
¿Cuáles son las precauciones que deberíamos considerar?
Para averiguarlo recurrimos a Avi Corfas, un argentino que desde hace años trabaja en temas de ciberseguridad en Israel, país que se ha transformado en un líder de reputación mundial en esta materia. Corfas es vicepresidente para Asia-Pacífico y América Latina de Skybox, una empresa con sede en Silicon Valley que acaba de obtener una inversión de 150 millones de dólares para expandir su plataforma de gestión integrada de seguridad.
Avi Corfas recibió a esta cronista en Israel y luego visitó Infobae para explicarnos cuáles son los grandes desafíos que enfrentaremos en 2018, en temas de seguridad informática.
— ¿Hacia dónde vamos en temas de ciberdelito?
—La ciberseguridad ha ido adquiriendo cada vez más importancia porque hoy el tejido de nuestra vida – la financiera, el agua que tomamos, la electricidad, todo está gestionado por informática. Antes ni se pensaba en el tema. Pero, cuando empezó a desarrollarse la interconectividad, muchos delincuentes, que también están interconectados, aprovecharon para empezar a atacar y a hacer todo tipo de daños. Llegamos hoy a la situación en que un estudiante secundario en Moscú puede dejar a un país entero sin electricidad por dos días, sin levantarse de la cama.
—Hackea un sistema vital desde la PC de su casa…
—No lo hackea directamente, lo que hace es que “secuestra” redes de cientos de miles de dispositivos – que pueden ser PC, cámaras de seguridad o dispositivos de control de plantas de energía y otras cosas que a uno ni se le ocurre que tienen dentro una computadora. Entonces, la seguridad pasa a ser algo esencial. Sin seguridad no se puede funcionar. Un banco no puede operar, un gobierno no puede gestionar, las aerolíneas no pueden volar. La seguridad pasó a ser tan esencial como la electricidad.
BIBLIOGRAFÍA
INFOBAE (2017), Muriel Balbi, Las cinco principales ciberamenazas para 2018 y cómo combatirlas, recuperado de: https://www.infobae.com/tendencias/innovacion/2017/12/09/las-cinco-principales-ciberamenazas-para-2018-y-como-combatirlas/, el 28 de febrero de 2018 a las 12:50 p.m. (pág. web).